Igor Hernández y Francisco Monaldi publican reporte sobre la industria petrolera para el CID de la Universidad de Harvard

Un completo reporte del modelo de gestión y resultados de PDVSA y la industria petrolera venezolana, titulado “Weathering Collapse: An Assessment of the Financial and Operational Situation of the Venezuelan Oil Industry”, es parte de una serie de diagnósticos para abordar las diversas manifestaciones de la crisis en Venezuela.

El pasado viernes 18 de noviembre los profesores del Centro Internacional de Energía y Ambiente del IESA, Igor Hernández y Francisco Monaldi, publicaron un reporte detallado del modelo de gestión y resultados de PDVSA y la industria petrolera venezolana.

La investigación, titulada “Weathering Collapse: An Assessment of the Financial and Operational Situation of the Venezuelan Oil Industry”, es parte del proyecto "Venezuela", una serie de diagnósticos para abordar las diversas manifestaciones de la crisis en el país, los cuales han sido organizados por el Centro para el Desarrollo Internacional de la Escuela Kennedy de Gobierno de la Universidad de Harvard.

Los autores inician apuntando a los altos precios del petróleo de la década pasada, como una ventana de oportunidad única para incrementar la inversión y producción en la industria nacional. Sin embargo, las conclusiones del trabajo muestran cómo la disminución continua de la producción evidencia que dicha oportunidad fue desaprovechada.

En suma, Hernández y Monaldi afirman que “El bajo rendimiento de la industria petrolera venezolana se divide en dos categorías: los múltiples problemas que enfrenta PDVSA; y el aumento de los riesgos extra-geológicos que enfrentan los inversores extranjeros que operan en el país”.

Por un lado, se detallan elementos como el desplome de las exportaciones con respecto a la producción, la expansión masiva del consumo interno de derivados del petróleo, el subsidio a exportaciones para América Latina y el Caribe y las actividades no petroleras desempeñadas por la compañía estatal.

La segunda categoría se relaciona con el deterioro del marco institucional que favoreció cambios radicales, tanto fiscales como regulatorios. Asimismo, las distorsiones macroeconómicas que afectan la estructura de costos de los proyectos, las limitaciones en cuanto a infraestructura, y el desmantelamiento del capital humano de la petrolera estatal. Todo esto dejó a la empresa con una capacidad limitada para operar con eficacia.

Considerando diversos escenarios, los autores estiman un déficit de financiamiento para PDVSA de entre 5 y 11 mil millones de dólares solo en 2016. Incluso ante mejoras importantes del flujo de caja y entorno institucional, los problemas financieros y operacionales de corto y mediano plazo de la industria harían difícil recuperar rápidamente la producción.

Aún en este panorama, Igor Hernández y Francisco Monaldi no ponen en duda que el país siga contando con la ventaja de poseer una enorme base de recursos hidrocarburíferos. Terminan por manifestar que la implementación de políticas macroeconómicas adecuadas y un marco regulatorio favorable a la inversión podrían conducir a incrementar la producción en el mediano plazo.

Este proyecto, reunió a un equipo multidisciplinario de especialistas para entender los desafíos macroeconómicos actuales que enfrenta el país.

Le invitamos a leer Weathering Collapse: An Assessment of the Financial and Operational Situation of the Venezuelan Oil Industry