- En primer lugar para mí el IESA tiene autoridad, reputación y conocimiento y eso fue altamente persuasivo. El segundo factor era el costo en bolívares. La competencia más cercana era la maestría en Gerencia Empresarial de Altos Negocios de la Universidad de Miami, pero era en dólares, con gastos de pasaje y estadía, tenía que salir del país y alejarme de mi familia y mi negocio. Y el tercer factor es que personalmente estoy dando un salto a negocios internacionales y consideraba que necesitaba entrenamiento porque, a pesar de haberlo hecho exitosamente, no sabía si lo estaba haciendo adecuadamente. El IESA tiene la maestría más actualizada y para mí era fundamental estar seguro de que el horizonte que yo me había planteado era la tendencia mundial. Y fue fantástico. En Venezuela, a este nivel, lo mejor es el IESA.

- Te puedo decir que estoy 100% satisfecho.

- Están al día y tienen excelente profesores. Eso fue lo principal. Y tuve un plus, porque en mi caso el grupo era tan bueno como los profesores. Cuando yo me paseaba por algún escenario de negocios siempre tenía un compañero de clases que lo había hecho con éxito o no. Los compañeros fueron otros profesores para mí.

- Creo que cuando yo ingresé hace dos años fue el momento ideal. Apenas estábamos entrando en una recesión y la decisión era más fácil de tomar. Ahora estamos en plena recesión y, seguramente, no será fácil tomar decisiones de este tipo. De todos modos, el costo de oportunidad del IESA es muy claro: la inversión es en bolívares, entonces el IESA resultaba más económico que salir al exterior, además te ofrecen la doble titulación, es decir, sales con el título del IESA y con el de la Universidad de Tulane, de Estados Unidos.

- Las empresas en Venezuela cuando llega la recesión su primera acción es eliminar inversión en educación y formación, porque el retorno de la inversión es a mediano y largo plazos y porque la incertidumbre por el futuro no te permite tomar decisiones arriesgadas. Los gerentes entendieron que eso los dejaba fuera de competición y decidieron invertir en sí mismos. En mi caso, la gran mayoría de los estudiantes pagaron sus estudios, no las empresas para las cuales trabajaban.

- Tuve compañeros que se acercaron a la Maestría para conocer posibilidades de emprendimientos familiares. Hubo muchos casos. Y descubrí que a los que estábamos allí no nos importaba tanto el título, queríamos el conocimiento, el rigor académico, el título era absolutamente irrelevante. Necesitábamos conocer las tendencias de hacia dónde van las cosas. Me llevé una gran sorpresa y un gran placer en el IESA.

- La evolución fue interesante. Lo mío son empresas familiares; tenía éxito, pero no sabía por qué. Ahora sé técnicamente qué es lo que hago, sé porqué tuve éxito y en qué fallé. Uno ya sabe cuál es el siguiente paso, sobre todo en un país donde la planificación ya casi no existe. Tuve tiempo de reflexionar y planificar. En clase descubrimos que todos los trabajos los relacionamos con nuestra propia área de negocios. Trabajamos sobre nuestras empresas. Tengo claras mis metas y límites, para el presente y para el futuro. Antes era más intuitivo. Hoy en día es más expedito. Por ejemplo, venimos trabajando en temas de la LOT desde hace 6 meses, antes no lo hacíamos.

- Una herramienta con la cual yo no contaba era extraer información de los estados financieros, desmenuzar un estado contable. Lo siguiente es someter a parámetros contables la salud de la empresa. En mi empresa la planificación estratégica siempre existió pero hoy es más estricta en su ejecución. Dónde invertir el dinero y cómo manejarlo es un tema en el que salimos sumamente fortalecidos de aquí. También la perspectiva del comportamiento organizacional, hacemos cosas que antes no hacíamos como la aplicación de las carreras profesionales y las políticas de recompensas y retribución de los empleados. Ahora estamos claros. Hay repercusiones grandes y otras sutiles, pero al final suman, y del IESA saqué pura suma.

- Ya comenzamos. Ya tenemos a dos integrantes de la empresa en el IESA, y tenemos otros dos en otra universidad. El IESA tiene un pequeño problema en el costo de oportunidad para las empresas medianas, porque el costo es muy elevado para ellas. No es el caso de las grandes empresas. Uno selecciona muy bien los candidatos que envía al IESA para que sea más provechoso.

- Te vas a reír con lo que te voy a decir, porque yo presenté el examen de admisión seis meses antes de que se iniciaran las clases del MBA y no fui aceptado. Era la primera vez que me pasaba esto. Estudié en Harvard pero me rechazan en el IESA (Risas). Como a los tres meses me llamaron para ofrecerme el EMBA que era un producto diseñado para ejecutivos y así entré. El proceso de admisión del IESA puede ahuyentar a muchos, pero para los que hemos sido rigurosos puede ser muy atractivo. Por un lado es un reto y, por otro, es diferenciador.

- ¿Crees que eso garantizó la calidad del equipo en el salón de clase?

- Creo que fue todo el proceso. Fallaron conmigo en lo individual pero acertaron en lo grupal. Conformaron un grupo realmente bueno.

- Yo les diría que uno puede apuntar a cursos medianamente buenos, con profesores más o menos actualizados. Puedes tener una camioneta común o un Mercedes Benz, que es más caro pero te va a durar toda la vida y está diseñado a la medida. Ninguna de nuestras materias fue excesivamente teórica. Todas tenían una traducción en el día a día que la captabas enseguida. Eso no tiene precio. Por una parte a las empresas les diría que si quieren rigor académico y que te enseñen cuáles son las tendencias mundiales y hasta donde se ha llegado, ésta es la institución y éstos son los profesores. Esta inversión es redituable desde el primer día y sin terminar. Algo curioso es que en nuestras oficinas nos preguntaban en qué módulo andábamos porque llegábamos aplicando cambios inmediatamente. Esta es una inversión muy bien hecha, es un traje hecho a tu medida. Ésta es la alternativa lógica.

- Absolutamente todo el mundo. La maravilla del IESA es que no te puedo decir que hay un énfasis en una profesión. Hay espacio para todos y herramientas para todos y todos podemos aprender igual. Me conseguí con sociólogos, comunicadores sociales, educadores, abogados y hasta una licenciada en arte, y a todos nos funcionaba. Ingenieros hay muchos, claro, pero el sistema está hecho para que aprendas muchísimo. Gente esforzándose para salir adelante. Yo me gradué en humanidades y apenas vi matemática. Al venir aquí te das cuenta de que alguien con constancia, dedicación y ganas de aprender, aprende finanzas, estadística, contabilidad tranquilamente y como nadie. Yo fui el número 2 de mi promoción. El que se esfuerza le va bien independientemente de su área y las herramientas están disponibles para todos. El IESA es versátil.

- Al IESA vienen los más experimentados, con más perfil. Aquí se evalúa con exámenes, porque desde que el mundo es mundo si no ejerces presión los sistemas no avanzan. Para darte un ejemplo: tuve un excelente profesor de Finanzas, Carlos Jaramillo, una maravilla. Pero también tuve dos profesores más de Finanzas, el gerente de Análisis de Riesgo del BBVA Banco Provincial, Rafael Freire, uno de los más brillantes, y el otro Roberto Piluso, gerente de Proyecto e Ingeniería de Inelectra. Vi Estadística con el profesor Cándido Pérez, un profesor brillante y muy exigente, pero también fueron mis profesores Arturo Blanco, gerente de Seguridad Industrial de Schlumberger y a Marlon Hernández, de Pernod Ricard, con maestría en Estadística. El que quiera le puede sacar todo el provecho del mundo e incluso descubrir habilidades desconocidas. Sólo debes tener la capacidad de darte cuenta de ello y la disposición. En las universidades americanas te puedes dejar llevar por la inercia y llegas al final, pero no destacarte, pero si quieres sacarle provecho al máximo tienes la apertura a lograrlo. El IESA es igual. Los más son los que quieren sacarle provecho, no reparan en horas de clases, ni trabajos, ni exámenes.

Es Abogado, de la Universidad Católica Andrés Bello; Doctor en Ciencias Sociales de la Universidad Central de Venezuela; Master in Public Administration de la Universidad de Harvard (EEUU); Master in Business Administration del IESA; Global MBA de la Universidad de Tulane (EEUU); profesor por concurso en pregrado en la UCAB (Derecho) y en postgrado en la UCV (Gerencia de Negocios). Dirige instituciones educativas en Venezuela y Panamá.