
Guerra de marcas
En el terreno de los deportes, hay una rivalidad fuera del campo casi tan grande como la que existe entre las selecciones: la disputa entre anunciantes oficiales y no oficiales por capturar la atención del consumidor se convierte en una competencia feroz en la que gana, no necesariamente quien invierta en más recursos, sino quien aproveche mejor el ingenio y la creatividad.